21 diciembre 2009

Una canción de navidad

Hiii, pequeño fanfic que hice en honor a esta serie que sin duda se ha vuelto una de mis favoritas *_* me encanta! el fanfic es de Fujibato asi que :P, no como si las clamp fueran a escribiri algo asi XD de todas formas espero que les guste dure un rato inspirandome:

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El frio se hacía cada vez mas delicioso, una suave bufanda protegía mi cuello, podía sentir como los animales se escondían de la nieve, podía ver como los copos blancos caían del cielo sin parar, a pesar de ser un día helado era un día precioso, asi que decidí que era perfecto ir afuera y seguir cumpliendo con mi misión:

- No seas tonta Dobato, ¿no ves que esta helado? ¡no podrás llenar la botella si te enfermas entra a la casa! –dijo mi acompañante

- Para nada Ioryogi-san, yo no me enfermare ¡pondré todos mis ánimos! Al fin y al cabo solo tengo 12 meses mas –dije y salí por la puerta a pesar de los incesantes gritos de mi cuidador

Las calles estaban cubiertas de una capa gruesa y helada de nieve, tuve que tomar un paraguas ya que caía mucha, la ciudad está muy tranquila, las calles estaban vacías, parecía que días como hoy a la gente le gustaba quedarse en sus hogares.

- Te lo dije Dobato, ttt-te dije que nos qqq-quedaramos eee-en la ccc-casa –me dijo Ioryogi con mucho frio

- Anda no seas aguafiestas, debo conseguir a alguien a quien pueda ayudar ¡antes del 24 tendré al menos un caramelo más!

- Espero que valga el ssss-sacrificio –se limito a decir

Camine y camine, pero no había un alma en la ciudad, solo los centros comerciales estaban abiertos… y vacios.

Me sentí muy triste, no había nadie a quien yo pudiera ayudar, soportando la cólera de Ioryogi-san me dispuse a regresar a casa.

Mientras volvía, vi una tienda, de las que me explico Ioryogi que la gente va a entretenerse un rato, era una especie de restaurant, pero sus empleados debían hacer cosas para que la gente estuviese contenta.

Eso me dio una gran idea.

Corrí hacia allá, estaba lleno de gente “tal vez no haya perdido el viaje” me dije a mi misma, Ioryogi quedo en silencio. Al entrar vi el ánimo de la personas, todos estaban sonrientes, estaba adornado de navidad aunque un poco rupestre, era un lugar muy acogedor. Pero no podía curar a nadie de allí, todos se veían felices ¿Qué podía hacer? Mientras buscaba vi a una silueta familiar, el volteo a mirarme, yo me acerque:

- ¿Fujimoto-san? –dije al ver su rostro

- ¡Tú! ¿Qué haces aquí? –me respondió dejando caer el vaso que tenía en una mano

- Pues yo… -dije, no sabía que responderle, creo que no debería decir que buscaba corazones por sanar

- No me digas, has vuelto a las andadas –me dijo el despectivamente, me dolió la mirada que me dedico

- ¿A las andadas? –dije afligida, no sabía porque me trataba asi ni a que se refería

El simplemente señalo hacia arriba, yo seguí el curso de su mano, señalaba a un cartel que ponía: “Taberna clover, 24 horas al día”

Taberna… yo estaba en una taberna… y cuando yo lo conocí el me vio con aquel viejo… yo estaba un lugar de esos… solo quería que el viento me llevara

- ¡Yo no sabía! –dije tratando de justificarme –yo no vi… esto… yo no… ¿tú no puedes seguir creyendo que soy una chica de ese tipo verdad? –dije casi a punto de llorar

- A saber, no te conozco lo suficiente –dijo él y se voltio

- Pero ¡Fujimoto-san!, yo no haría eso, yo no… créeme no sabía que esto era… no leí bien –dije yendo tras el

- ¿Por qué mi opinión te es tan importante? –dijo mientras atendía una mesa, tenía los ojos entrecerrados

- Porque… a veces yo siento –“estás hablando de mas Kobato” decía una voz en m interior “vete por la tangente” –trabajamos juntos, por eso no quiero que creas otras cosas de mi

- Ya, está bien –dijo el secamente

- ¡Kiyokazu-san, ven es tu turno en el karaoke! –grito un hombre desde la barra

- Ya te dije que no cantare ni loco –dijo Fujimoto con cara de pocos amigos

- ¡Es parte de tu trabajo! –gritaba el hombre de la barra

- ¡Yo lo hare por el! –dije gritando y corriendo hacia él, deje atrás a Fujimoto con cara sorprendida

- ¿Tu quien eres? –dijo el hombre de la barra

- Me llamo Hanato Kobato, un placer señor

- Bien Kobato-chan, ten –dijo el señor con una sonrisa ofreciéndome el micrófono

La música empezó a sonar audiblemente, toda la letra de la canción salía a través de un monitor, yo solo me deje llevar, la música retumbaba y yo cantaba con todo mi corazón, quería que todos escucharan, creo que más que nada quería liberar mi alma.

Al terminar, voltee a donde estaban todos, la gente me aplaudía y pedía que cantara mas, yo estaba muy contenta de que les gustara asi que asi lo hice.

Después de un rato me quede charlando con varias personas del lugar, ¿Quién iba a creer que con solo escuchar los problemas de alguien ganaría dos caramelos más? Haber salido hoy estaba bien después de todo.

Estaba dispuesta a irme, cuando en la entrada del lugar alguien me retuvo por el hombro

- ¿Por qué hiciste eso? –dijo Fujimoto con los ojos llenos de calor

- Yo… quería ayudarte –dije agachando la cabeza

- Gracias –dijo para mi sorpresa –espera 5 minutos

- ¿Por qué?

- Para irnos juntos, mi turno ya casi acaba –dijo quitándose el delantal

- ¿En serio? ¡Claro! Es mejor irse acompañado que estar solo –dije con una sonrisa

- Ya –dijo el yéndose algo sonrojado

Volvió a cabo de 5 minutos, cargaba un suéter con cuello alto, sin bufanda, unas botas largas, un pantalón jean, mas unos guantes gruesos que parecían hechos a mano

- Vámonos –dijo el

- Si –dije sonriente


Ya era oscuro, y caía demasiada nieve, como el no trajo un paraguas compartimos el mío, no sabía la razón pero eso hizo que mi corazón saltara de felicidad.

Al llegar a casa, estaba a punto de decirle adiós, pero él me detuvo antes

- Esto… ¿quieres tomar algo de chocolate caliente conmigo? –dijo sin mirarme a la cara

- ¿Cómo? –dije yo muy sorprendida

- Es para darte las gracias por lo que hiciste hoy –dijo sin aun verme a la cara

- Pero, yo solamente… -dije sin saber qué hacer

- Anda, hace frio, di que si –me insistió

- Está bien- y entre felizmente seguida de él a su apartamento

- “Si Kobato sigue asi, y no establece sus prioridades, esto va acabar mal” –pensaba un animal de peluche dentro del bolso de la chica.


2 comentarios:

Melu dijo...

hola!! aussy!!! me encanto!!!!! esta muy linda1!! lamentablemente fujimoto en el anime no es tan amable con ella no??? jajajja gracias seria una palabra que se la tragaria antes de decirla XD broma, verdaderamente me encanto!! escribis muy bien, haces sumergir a las personas en el espacio y ambiente que creas!! esta super lindo!! bsos!

Vicky Yun Kamiya dijo...

AH!!! Como me gustan los Fujibato, para mi son la nueva pareja romántica del shoujo!!! Preciosa historia, ojalá avanzen así en el manga pronto.
Me encantó lo del chocolate caliente.

Besos

Vicky Yun